Los contagios de COVID-19 continuaron este jueves dentro del equipo de los Ravens de Baltimore y uno de los afectados fue su mariscal de campo estelar Lamar Jackson, cuando apenas faltan tres días para que su equipo dispute el partido aplazado frente a los Steelers de Pittisburgh.
El actual Jugador Más Valioso (MVP) de la NFL es la estrella más reciente en infectarse en lo que se ha convertido en uno de los contagios de COVID-19 más grande en la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), y que comenzó hace cuatro días.
De acuerdo a varias informaciones periodísticas, los nuevos infectados son cuatro jugadores y entre ellos se encuentra Jackson.
El miércoles, la NFL anunció que el partido entre Ravens y Steelers, programado para esta noche, en el tradicional Día de Acción de Gracias, se disputaría el domingo, debido a los contagios en Baltimore.
Una acción que no cayó bien entre los jugadores de los Steelers por verse afectado por otro nuevo aplazamientos, pero que la NFL dijo que se trataba de preservar y proteger la salud de los miembros de ambos equipos.
Sin embargo, el entrenador de los Ravens, John Harbaugh, informó a sus jugadores que las instalaciones del equipo se cerrarán al menos hasta el próximo lunes, por lo que disminuyen las opciones de que se celebre el duelo del domingo ante los Steelers.
Informe del positivo al COVID-19 de Jackson fue informado en primera instancia por NFL Network.
Sin Jackson, Baltimore se queda con sólo dos mariscales de campo en el roster, Robert Griffin III y Tyler Huntley, quien está en la escuadra de entrenamientos.
El pasador de tercer equipo Trace McSorley está actualmente en la lista de reservas/COVID-19.
El jueves, los Ravens colocaron al ala defensivo Jihad Ward en la lista de reservas/COVID-19, de acuerdo a Field Yates. Ward, quien estuvo inactivo en los últimos cuatro partidos, fue el octavo jugador del equipo y tercer liniero defensivo en ir a la lista en la actual semana.
El brote en los Ravens comenzó horas después de la derrota del pasado domingo por 24-30 en tiempo extra ante los Titans de Tennessee, cuando el equipo fue informado de que los corredores J.K. Dobbins y Mark Ingram habían dado positivo. El tackle defensivo Brandon Williams fue identificado más tarde como un contacto cercano de alto riesgo.
Los Ravens creen que Jackson se contagió en el duelo ante los Titans, en el que tomó el balón del centro Patrick Mekari, quien también había dado positivo. El puesto del mariscal de campo estelar de los Ravens en el vestuario los días de partido está cerca del espacio que utilizan Dobbins e Ingram.
Fuente: Efe
