Aquí no es villamelón «Los amarres de Manolo». Por Sergio Soto Azúa.
A cuatro años de la sucesión gubernamental, pareciera muy evidente el quien es delfín del gobernador. El alcalde Manolo Jiménez ha tenido cancha abierta para hacer amarres, usar presupuesto y trabajar de manera libre en su administración; prácticamente es el único alcalde de peso que tiene el gobernador Miguel Ángel Riquelme.
Así mismo, pareciera que Manolo también es la carta de los ex gobernadores, con excepción de HMV. Con frecuencia se puede encontrar a los ex gobernadores en los eventos de Manolo, también se les ha visto haciendo amarres, como el caso de la reciente firma de acuerdos con el Clúster de Energía, encabezado por el ex gobernador Rogelio Montemayor.
Excelente manera de tejer en política; sin embargo, lo que no sabemos, es quién está tejiendo; en efecto, hay duda si es el alcalde Manolo Jiménez para alcanzar sus sueños, o sean los exgobernadores para alcanzar los propios. Tambien, quizás la cercanía de los ex gobernadores, sólo responda a un tema de «estirpe» y por eso al único que ni se le invita sea al ex gobernador Moreira «el bueno».
Por otra parte, hemos visto que muchos funcionarios y actores políticos, sin mediar ninguna indicación, ya se le entregaron a Manolo.
Ahora bien, a que responde todo lo anteriormente mencionado, a caso a los nuevos tiempos en la democracia, que les otorga la libertad de tomar partido hacia el perfil que estimen con más futuro, o más les convenga o a otra razón.
Es importante no pasar por desapercibida aquella regla del manual, que dice: «El que se mueve antes no sale en la foto». No podemos creer que es normal lo que esta pasando con Manolo, quien lleva una clara delantera en la sucesión gubernamental y la está trabajando con amarres, buenas decisiones y una clara estrategia de posicionamiento mediático como «el candidato natural». Pero, no tenemos claro si todo esto es en el momento adecuado.
No debe dejarse de analizar qué existen otros actores, hay más grupos politicos y es entonces cuando debemos cuestionarnos si es el caso que estos se encuentran celosos y pensando maldades, o estarán esperando el tiempo para mover la agenda. La política es muy celosa y los actores pueden ser muy perversos.
Hasta el momento nadie ha detenido a Manolo. De ser el caso que sea «el delfin» del gobernador Riquelme, este último lo está haciendo bien, ha dejado en claro que lo está proyectado y que le tiene aprecio. En el supuesto de que no sea la carta del gobernador, entonces se corre el riesgo de ya no poder detenerlo.
«El candidato natural» lo escoge la gente, no el gobernador, como fuera la historia de lo que le sucedió al ex gobernador Enrique Martinez con HMV, cuyo final de la historia, todos lo conocemos.
Buen fin de semana.
