En un correo electrónico, hecho llegar a la redacción de periódico acceso, (con fecha 11 de Junio del 2011), hace conocer la presunta participación del alcalde de la capital de Coahuila Manolo Jiménez, en una conspiración para sembrar un delito.

Según menciona el correo, la filtración del correo se pudo dar por motivo de que el CONSPIRADOR 1 (Le llamaremos así), olvido cerrar su sesión de computadora en la oficina donde laboraba.

Según la ley actual en México, un correo tiene valor jurídico si cuenta con firma electrónica digital y las plataformas como Hotmail, Gmail, Yahoo etc. De donde sale este correo (Hotmail) cuenta con la firma digital. Este medio pone a disposición de las autoridades lo que necesiten y sea requerido.

En el mencionado correo, EL CONSPIRADOR 1, le escribe a su jefe en turno, haciéndole mención de una inconformidad que se suscitó (da a entender) en la campaña política de Rubén Moreira (desarrollada en el 2011), en ese entonces; Manolo Jiménez, fue seleccionado como candidato a diputado local por el distrito III de la ciudad de Saltillo.

Dejamos a su consideración las capturas de pantalla del correo electrónico completo, donde el CONSPIRADOR 1, presuntamente incrimina al actual Alcalde de Saltillo, en una operación para inculpar de acoso sexual, al entonces subdirector de turismo del municipio de Saltillo, Jorge Segundo Rodríguez. (Anexamos link)

https://www.zocalo.com.mx/new_site/articulo/escandalosos-antecedentes-de-nuevo-funcionario-de-sedesol-federal-140771714

En el correo el CONSPIRADOR 1 menciona «Lo que hicimos para sacar de la jugada» en referencia al delito que en su momento le imputaron a Jorge Segundo Castillon por acoso sexual y también acusa al alcalde «Falto de acuerdo y compromisos».

Según el artículo 243 y 247 del código penal de la ley actual mexicana, el delito de falsedad y falsificación serán castigado de dos a ocho años de prisión.

Así como la prescripción del delito tendrá el mismo término de la pena maxima.

Este sería el último año vigente para poder levantar una carpeta de lo sucedido en el 2011, sin embargo; queda el antecedente y al criterio de la opinión pública, el conocimiento de la capacidad ética y moral del actual alcalde de Saltillo, Manolo Jiménez Salinas.