MI OPINION.
Adrián Garza Pérez
agpconsultor@gmail.com
Coahuila. Los negocios y el agua.
Coahuila es uno de los estados de la republica donde el agua es mercancía. Estamos enclavados en el semidesierto, acá el agua es providencia, hay que cuidarla más que en otros sitios de la basta geografía nacional. El agua es escasa, llueve poco y los mantos son exiguos; gastarla en cosas que no tengan que ver con brindar el vital líquido a pueblos y comunidades, en regar y dar vida a la flora y la fauna, son acciones extra naturales, que arriesgan la seguridad patrimonial.
El asunto empezó allende las fronteras, en Texas y otros estados de la Unión Americana. Los emporios petroleros acometieron ranchos y comunidades para perforar en escarceos de exploración y perforar para extraer el “shale gas”, insumo energético que produce cuantiosas ganancias, montones de dólares; trillones (millones de millones de millones).
La Reforma Energética en México, urgía un nuevo paradigma: para la exploración y extracción de petróleo y energéticos derivados, en aguas profundas; para nuevas tecnologías y para modernas asociaciones estratégicas de estos negocios que son también renta petrolera nacional, abono presupuestal, y servicio del gasto corriente. Los cambios tenían prioridad endógena, pero cierto es que extramuros se empujó fuerte; ya nos sentábamos tarde a la mesa energética de los vecinos.
El saboteo a los precios del petróleo y otros efectos traviesos desde la unión americana y desde el lejano oriente y algunos países árabes, aliados todos en el mismo negocio, tumbaron las ambiciones de algunos y retrasaron los grandes proyectos nacionales. Pero no todos se detuvieron, algunos empoderados, crearon empresas y asociaciones estratégicas en los estados fronterizos y en algunas otras entidades donde se perfilan refinerías y se conducirán energéticos interestatales.
Coahuila, y sus cuencas de Burgos, de Sabinas y de Piedras Negras (que se extienden desde Viesca hasta Hidalgo, cruzando el norte de La Laguna, la Carbonífera, los Manantiales y sobre todo la Franja Fronteriza, contigua al “triángulo virtuoso” donde confluyen Coahuila, NL y Tamaulipas, formado por seis o siete municipios estratégicos), conforman “una laguna de energéticos” que carcome las mentes ambiciosas de actuales socios, en ambos lados de la frontera.
Se asociaron empresarios y políticos, dueños de empresas y dueños de decisiones y recursos públicos; por eso se llaman “asociaciones estratégicas”, ¿quién contra ellas? Explorar y explotar el shale gas, es la primera etapa; pero no olvidemos el carbón y otros sub productos, la idea básica; acaparar todo (comprar tierras, agenciarse derechos y minas, adquirir denuncios, controlar permisos y pedimentos; regentear poceros (coyotear), para ser mayorista ante CFE y otras carboníferas). Los magnates mineros, del shale y de todo negocio afín, tendrán que negociar con estos nuevos socios.
El agua es estratégica para sus ambiciones, que sea recurso escaso y que en poco tiempo, su uso indiscriminado signifique sequía, contaminación y erosión violentada de fauna, flora, de bosque, campo y desierto, son efectos colaterales que “los enemigos del progreso”, no aprecian como insignificantes. El fracking, esa técnica moderna que usa agua a presión para romper rocas y empujar, con efecto inverso, el líquido y el gas, para que afloren, usa agua como pistón básico; se gastan millones de litros y se contaminan otros tantos con los químicos asociados al proceso. Los mantos en el subsuelo se contaminarán en vastas extensiones subterráneas. Pasarán años antes de siquiera suponer el impacto negativo. Empresas, llegando al estado, con agua a discreción, como insumo y proceso básicos; son dupla funesta.
La primera llamada al exterminio será, la falta de agua y la muerte paulatina de la flora y la fauna; se agotara el líquido y se secarán afluentes (arroyos y ríos, pozas y lagunas, sacas y abras, y hasta veneros y chupaderos naturales; los ojitos de la sierra). Se secaran norias y se bajará el espejo en pozos profundos. Se irá extinguiendo todo, se contaminará el ambiente y el campo morirá. Los trabajos de las maquinas enormes, impactan el monte; ranchos y ejidos.
Que los ricos y ambiciosos desde el gobierno y la empresa, que hoy son un solo ente jurídico vía “asociaciones legales”; hayan adquirido ranchos y derechos de agua, no les justifica el acabar con la tierra, con el campo y sobre todo con el agua; que siempre, “aguas abajo”, es derecho comunitario.
“Coahuila. Los negocios y el agua”. . Recuerden al gobernador Guillermo Padrés en Sonora y su presa de la ignominia; le costó la elección en su estado por sus excesos y el robo del agua común, y podrá sufrir, juicios futuros.






