Margarita @marellanesc, el pecado de @GustavoMadero Alexia Barrios G. No se confunda, amable lector, esta opinión no es para hablar de la vida privada de la alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, quien hoy cumple 14 años de casada, ni tampoco del ahora candidato a reelegirse como presidente de Acción Nacional. Seguro ambos actores tienen vidas honorables dentro de los cánones morales de su partido, pero quizá no sea así en sus quehaceres públicos, donde hay sospechosas relaciones con personajes oscuros y posibles testaferros para ocultar intereses de todo tipo. Me refiero a que no tarda en explotarle tanto a Arellanes como a Madero, el expediente caliente de sus relaciones con los hermanos Rojas Cardona. No es un asunto menor, porque poco a poco, las pinzas van sobre el también conocido como “Zar de los Casinos” de Nuevo León, peleado a muerte con el grupo calderonista, comandado por el abogado Julio Esponda, y que lo tienen bien medido. Vean si no, el pasado 5 de marzo, el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) inició un procedimiento de responsabilidad administrativa contra el juez Ricardo Hiram Barbosa Alanís, acusado de otorgar suspensiones provisionales definitivas a Arturo Rojas Cardona, el titular de los casinos de grupo Palmas. El periodista Álvaro Delgado, uno de los mejor informados de lo que pasa al interior del PAN, comentó hace unos días en su editorial para el portal de Proceso que “entre militantes gana terreno una certeza: Carcomido por la corrupción, los rencores y las venganzas entre las facciones, el Partido Acción Nacional se encamina hacia la ruptura. La razón: Muchas de las prácticas deshonestas, identificadas tras la derrota de 2009 por la Comisión de Reflexión y que Gustavo Madero se comprometió a erradicar al asumir la presidencia –en 2010–, se consolidaron y, más aún, brotaron otras, como el dinero de casinos a las campañas y la extorsión vía los moches.” Y Delgado sentencia, con razón: “con estos vicios, que no se resolvieron con los nuevos estatutos ni con la depuración del padrón, el 18 de mayo se elegirá presidente del PAN entre Madero –que quiere reelegirse para luego ser diputado federal y coordinador de la bancada– y la mancuerna Ernesto Cordero-Juan Manuel Oliva, quienes han puesto bajo sospecha el proceso”. Así las cosas, dos de esos casos del PAN indeseable podrían serlo Margarita Arellanes y Gustavo Madero, si no se deslindan a tiempo y corrigen sus acciones, podrían ser involucrados en un nuevo escándalo ligado a los casineros de Nuevo León, a quienes sus detractores señalan de recibir financiamiento de éstos y de estar preparándose no sólo para ganar la presidencia del CEN del PAN sino la gubernatura de Nuevo León. Los vínculos de Madero y Arellanes con los señores de los casinos en Nuevo León son añejos y muy evidentes, como lo han relatado diversos medios locales como El Norte, Milenio y publicaciones como Reporte Índigo y Proceso. Por ejemplo, el 27 de febrero de 2013, a unos días de haber tomado posesión como alcaldesa de Monterrey, Margarita cerró nueve casinos, casualmente, dejando abiertos los Palmas de Arturo y Juan José Rojas Cardona y Play City de Televisa, esto último, según han informado fuentes de la entidad, para que la alcaldesa y los hermanos Rojas explotaran el caso de la “mafia de Gobernación” para los noticieros de la televisora. Curiosa y paradójicamente, y bajo la alianza con la organización “Alcalde, ¿cómo vamos?” –que ha premiado y reconocido a la edil ligada a casineros- , Arellanes convirtió el tema “anticasinos” en su principal carta de presentación ante la ciudadanía de Nuevo León, al grado de jalar a los demás ediles de la Zona Metropolitana de Monterrey, en la misma línea política. En esta trama hay que dar cuenta de quién es quién. Por un lado, Margarita Arellanes, destaca su vínculo con José Serrano Montoya, cuyo jefe político es Marcos Mendoza Vázquez, ex coordinador de campaña de la alcaldesa y cercano al otrora tristemente célebre hermano del “señor de los quesos”, Fernando Larrazabal. Hay que decir que José Serrano Montoya formó parte del Grupo San Nicolás, todos vinculados con Rojas Cardona, entre los que destacan Fernando Larrazabal Bretón, Zeferino Salgado y Raúl Gracia, quienes se autonombran La Santísima Trinidad, según diarios locales. Sin embargo, el año pasado, al aumentar las diferencias internas, Margarita Arellanes y Serrano encabezaron una nueva corriente, la “División del Norte”. Este grupo tiene actualmente el control del PAN estatal y desde ahí han colocado a los candidatos a cargos públicos y han desechado a otros para otros tiempos, como Raúl Gracia y al propio Fernando Larrazabal, Como se recordará, la renovación estructura del PAN contempla la integración de 300 militantes que integrarán al nuevo partidos, de los cuales 270 serán electos en los estados y 30 serán a propuesta del Comité Ejecutivo Nacional (CEN). En esta dinámica, la alcaldesa de Monterrey ha sido acusada de inflar el padrón y de estar jugando sucio para neutralizar a sus contrincantes, como se evidenció al colocar a Iván Garza Téllez, como dirigente municipal del PAN, también señalado de estar en la red de los Rojas Cardona. Hay que destacar que Iván Garza fue, durante un tiempo con Gustavo Madero en el CEN del PAN, director del Registro Nacional de Miembros (RNM). De hecho, la revista Proceso y otros portales de Nuevo León, recuerdan que Roberto Gil fue quien acusó a Garza de haber sido en enlace entre los Rojas Cardona y Gustavo Madero. Muchos sospechan que dicha relación se mantiene viva para que Madero gane el CEN del PAN y después apoye sin problemas el ascenso de Margarita Arellanes a la gubernatura de Nuevo León, donde hasta ahora puntea en las preferencias. Para los casineros, no hay pierde. Si Madero no llegase al CEN panista, y con ello lleve en su derrota a Arellanes, ya preparan también a Felipe de Jesús Cantú o Ugo Ruiz para estar al tiro cuando sea el proceso interno de selección del candidato al gobierno de Nuevo León, que será este mismo año. Por ahora, la intromisión de los casineros en el PAN de Nuevo León, y con Gustavo Madero, fue una de las razones por la que renunciaran Fernando Elizondo y los diputados locales Luis David Ortiz Salinas y Jesús Cedillo, de quienes se comenta, podrían irse a las filas de MORENA o de Movimiento Ciudadano. Así las cosas allá en las laderas del cerro de la Silla, de la que seguiremos contando… alexiabarriossendero@gmail.com

              





