Las autoridades penitenciarias han perdido o cedieron parte del control del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Saltillo, tanto en el femenil como en el varonil, además de los centros penitenciarios de Torreón y Piedras Negras, en Coahuila, según informó este martes la Comisión Nacional de Derechos Humanos, en el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria.
En estos penales, en los que la CNDH observó autogobierno o cogobierno, los internos controlan aspectos como la seguridad, las actividades productivas, educativas, deportivas y servicios de alimentación, limpieza, mantenimiento y uso de los teléfonos públicos.
Coahuila obtuvo 5.08 puntos de 10 posibles en cuanto a gobernabilidad dentro de sus centros penitenciarios, entre los que se calificaron los aspectos que garantizan integridad física y moral del interno, los que garantizan una estancia digna, así como la reinserción social del interno y la gobernabilidad por parte de los funcionarios públicos.
El Centro de Reinserción Social Femenil de Saltillo obtuvo calificación de 7.29, el Cereso varonil de Saltillo 5.68, el de Torreón solamente 3.26 y el de Piedras Negras 4.01.
Dentro del Cereso Femenil de Saltillo se encontraron deficiencias en los servicios para mantener la salud de las internas, ya que cuentan con mobiliario en mal estado, equipo médico e instrumental en malas condiciones, así como la falta de suficiente personal médico para atender a las internas. La atención psicológica es deficiente de igual forma.
No hay prevención, atención y las acciones para atender incidentes violentos son muy poco eficientes. Además de que hay un control casi nulo en cuanto a la atención y prevención de la tortura y maltrato.
En cuanto al personal, el centro femenil muestra insuficiencia de guardias de seguridad y custodia.
El Centro de Reinserción Varonil, las deficiencias se muestran también en los servicios para mantener la salud de los internos, así como en la prevención y atención de la tortura, así como inexistente atención en el maltrato que sufren algunos reos a manos de sus compañeros.
Además, en el Cereso Varonil no existe un manual de procedimientos para presentar quejas, ni para visitas familiares o íntimas.
El informe señala además que hay deficiencias en el ejercicio de las funciones de autoridad por parte de los servidores públicos del Centro (existe control por parte de los internos en seguridad).
Indica además que existen áreas de privilegios y de objetos y sustancias prohibidas.
Otro de los puntos importantes que señala el diagnóstico es la presencia de cobros por parte de los custodios para protección, mantenimiento de los dormitorios, no realizar labores de limpieza y no cumplir una sanción administrativa. Así como los cobros por parte de los internos para protección, mantenimiento de dormitorios y para no realizar labores de limpieza.
Entre otras deficiencias más que señala la CNDH en el diagnóstico, se encuentra la falta de capacitación del personal de seguridad y custodia, así como las relacionadas en la integración del expediente técnico y la separación de reos vulnerables.
Fuente: El Heraldo







