La diputada federal del PAN, Esther Quintana Salinas, reconoció de manera pública que «le encantaría» ser algún día ser gobernadora de Coahuila, sin embargo, dijo también que «del dicho al hecho hay mucho trecho» y que por ahora únicamente tiene el deber de servir a los coahuilenses a través de su labor legislativa en la Cámara de Diputados.
Al término de la charla que impartió en el Tecnológico de Monterrey, en el marco del ciclo de conferencias organizado por el IFE en el marco del 60 aniversario del voto de la mujer en México, Quintana Salinas dejo ver su interés por ocupar en alguna ocasión el máximo puesto de elección popular que existe en el estado.
«A quien no le gustaría, por supuesto que me encantaría un día poder gobernar a nuestra tierra tan querida. Por supuesto que me gustaría, como me gustaría también ganar el premio Nobel de literatura», dijo la legisladora blanquiazul.
«A mí me gusta mucho la carrera parlamentaria, la disfruto intensamente, me he empeñado en hacer una carrera política, no les puedo decir que me disgustaría algún día ser gobernadora de Coahuila, por supuesto que no me disgustaría, me encantaría, pero entre el dicho y el hecho pues hay mucho trecho», agregó.
Dijo que por ahora se encuentra contenta y muy honrada en ser diputada de mayoría, y deberles el puesto a los coahuilenses.
«Se lo debo a los coahuilenses estar en la Cámara de Diputados, yo no tengo ahorita más que el deber de trabajar en ese lugar que ellos me dieron el año pasado al ser votada por ellos», declaró quien también fuera diputada local y líder del PAN en el estado. 
Por otra parte, en su conferencia, Esther Quintana aseguró que hay muchas leyes y acciones afirmativas para que se dé una verdadera equidad de género en el país, sin embargo, aún hay muchos espacios a los que las mujeres no han llegado, especialmente a aquellos en los que se toman decisiones importantes para un país y que tienen que ver con su transformación y su desarrollo.
«Se nos abrió una puerta a las mujeres para que pudiéramos ir entrando, pero todavía no ha sido suficiente, y no es problema de los varones, es problema de las propias mujeres, hay un valor que todavía las mujeres no hemos desarrollado bien que se llama solidaridad, que los varones llevan practicando hace siglos, pero las mujeres todavía no, no somos solidarias entre nosotras como debiéramos serlo, eso ha impedido que lleguemos a instancias como la Presidencia de la República», manifestó la diputada federal. 
Fuente: El heraldo 

              





