Todo parecía un día normal el 10 de diciembre de 1985 en el Ninian Park, de Cardiff, Escocia. Se disputaba un duelo por eliminatoria mundialista para México 86 entre galeses yescoceses, sin embargo, al finalizar ese encuentro, el entrenador local, Jock Stein de 63 años, sufriría un infarto fulminante al corazón y perdería la vida. El joven Alexander ChapmanFerguson estaba ahí como asistente técnico, y a la postre, se encargaría de las riendas de esa selección.En 1999, Alex sacaba al mercado su autobiografía, el libro más vendido en ese año en Inglaterra, y ahí señalaba, marcado por el trauma de haber visto morir a su amigo y maestro 14 años atrás, que se retiraría en 2001, a la edad de 60 años. Hoy podemos decir que ese fue una maravillosa promesa incumplida para elUnited, pero no se trataba de algo que no llegaría algún día.Habiendo ganado 5 FA Cup’s, 10 Community Shield, 4 Copas de la Liga, 13 Premier League’s, 1 Recopa de Europa, 1 Supercopa de Europa, 1 Copa Intercontinental, 2 Champions League, 1 Mundial de Clubes; 26 años, 6 meses y 3 días después de haber sido presentado como técnico del Manchester United, el 5 de noviembre de 1986, Sir Alex Ferguson ha anunciado este miércoles su retiro como entrenador al finalizar la presente temporada de la Liga Premier inglesa, situación que sucederá el próximo 19 de mayo cuando los “Red Devils” enfrenten el último juego de esta campaña ante el West Brom.La inteligencia y temple del escocés se han dejado ver incluso al anunciar su retiro, «la decisión de retirarme es algo que he pensado mucho y no la he tomado a la ligera, es el momento adecuado. Ha sido un honor y un enorme privilegio haber tenido la oportunidad de liderar este equipo, atesoro mi tiempo como entrenador del Manchester United», señalaba mediante un comunicado la mañana del miércoles.Apenas comparable con entrenadores tan exitosos en el deporte mundial como Phil Jackson, quien ganó 11 títulos de NBA, o Vince Lombardi, quien ganó los dos primeros Súper Bowl y de quien hoy en día lleva por nombre el trofeo de campeón del la NFL, “Ferggie” supera por mucho a ambos.Un caso único de resistencia y determinación en un equipo de la dimensión del United. Si bien no ha alcanzado el récord de más número de años al frente de un club, perteneciente a Guy Roux, técnico del Auxerre, francés (1964-2000), Ferguson ha dejado una marca poco fácil de alcanzar para cualquiera al frente de unequipo: 38 trofeos, 1,498 partidos (a falta de dos para acabar la Liga) y un 60% de victorias.Los resultados con el Manchester United no han sido gratis, a Ferguson le ha costado mucho construir lo que hoy en día significa el United para sus aficionados, para sus dueños y para el futbol mismo. «En los primeros años, el apoyo del consejo (de administración), y de Bobby Charlton (legendario jugador inglés) en particular, me han dado la confianza y el tiempo para construir un club de fútbol, en lugar de simplemente un equipo de futbol», citaba “Ferggie” en el comunicado que anunció su retiro.Ferguson dirigió generaciones excepcionales de futbolistas, desde la de Eric Cantona hasta la actual, pasando por la quinta de David Beckham, autora del histórico triplete de 1999, cuando ganaron la liga, la Copa de Inglaterra y la Liga de Campeones. Los logros de ese año, le valieron a Alex Ferguson su ingreso al Salón de la Fama del Futbol de Gran Bretaña y el reconocimiento de la realeza, al ser condecorado como “Comendador del Imperio Británico” y ser reconocido desde entonces cono SIR, el más alto grado de reconocimiento por debajo de los puestos reales para un británico.Por sus manos fueron moldeados jugadores con la entrega de Cantona, el carácter de Solskjaer o Rooney, la entereza de Giggs o Scholes, la fortaleza de Ferdinand, las manos de Schmeichel o van der Sar y los toques excelsos de Beckham o Cristiano. “Hay 18 jugadores con los que uno parte a la guerra, pero se crean vínculos de confianza. Es como la familia. Puede ocurrir que uno pierda la lucidez necesaria para juzgar el valor de un jugador. Es un gran peligro”, era lo que Ferguson siempre se repetía al tratar de entender el valor y el aporte de sus jugadores en el club.Por muchos amado y por otro tanto criticado, Sir Alex ha sido famosos por asumir una figura paternalista, como lo hizo con CR7, quien llego al United a los 18 años, o violenta, como cuando lanzó a Beckham un botín tras una discusión en el vestidor, pero siempre la de un líder ganador, el más ganador en la historia de este deporte en el mundo.Ferguson recibió de la FIFA las dos más grandes distinciones que alguien, en la posición de entrenador y hombre de futbol, pudiese recibir: en 2010 fue reconocido por la Federación Internacional de Historia y Estadística (IFFHS) de tal organismo, como el mejor entrenador de futbol de la historia, y en 2012 con la “Distinción Presidencial de la FIFA”, galardón concedido desde 2001 a aquella persona o institución que ha efectuado una contribución superlativa al futbol sin perseguir con ella el propio protagonismo.Sin duda, el retiro de Sir Alex Ferguson, por tratarse de una figura irrepetible, uno de los más exitosos entre los grandes entrenadores de la historia, marcará el fin de una época en el fútbol inglés y europeo.Aunque oficialmente el último duelo de la temporada 2012-2013 para el Manchester United será el 19 de mayo en casa del West Brom, no puedo ni imaginar lo que será “Old Trafford este domingo para despedir a su líder, al “boss”, al “mister”, su mejor cómplice y su mejor amigo.A la salida del escocés podría llegar Solskjaer, Mourinho, Moyes o Klopp, pero el domingo 12 de mayo, propietarios, aficionados y jugadores del Manchester United, quienes amamos el fútbol y el fútbol mismo, podríamos entonar fácilmente con gran nostalgia y profundo agradecimiento hacia Sir Alex, desde “el teatro de los sueños” o la comodidad de nuestro hogar, aquella canción de Alberto Cortez que a la letra cita: “Cuando un amigo se va queda un espacio vacío que no lo puede llenar la llegada de otro amigo”.Juan Roberto Rodríguez Lazcano@tobelaguna robertorodriguez_1@hotmail.com







