¿Alguna vez han tenido que ir a trabajar
a su oficina en ruinas?
a su oficina en ruinas?
¿Se han sentido completamente inseguros en las instalaciones de sus trabajos?
Pues hoy han retomado actividades en el edificio de la Torre de Pemex
después de la ya conocida explosión (o implosión) que acabó con la vida de mas
de 35 personas y dejó a otras cuantas decenas seriamente heridas. Es de llamar
la atención que este retorno a las actividades se lleva a cabo mientras se
continúa con la remoción de escombros y la reparación de los daños.
Obviamente antes de reingresar a todo el personal a las instalaciones,
los especialistas hicieron un análisis del estado del edificio y comprobaron
que no había daños estructurales derivados del accidente.
Lo que es sorprendente es lo mal que se ha manejado la información de la
causa de la explosión, es indudable que estamos hablando de un tema muy
delicado ya que la situación política del país ha volteado a la reforma
energética y la posible alianza público-privada entre PEMEX y empresario
aparenta ser la solución mas viable ante la desaceleración y posible crisis que
vive hoy en día la empresa del Estado. Sin embargo, no se entiende la premura
de salir a decir cualquier tontería en cadena nacional con tal de “calmar las
aguas”. Esto queda claro con la declaración del presidente de la república,
Enrique Peña Nieto, aclarando que el proceso de investigación sigue su curso y
que la filtración de gas metano es solo una parte de la misma. Demostrando
mesura y responsabilidad en el manejo de la información.
En alguna medida debo culpar a los propios ciudadanos de provocar la
premura en emitir un veredicto por parte del gobierno. Ya que se exige
información que puede llegar a ser incomprensible para la mayoría solo con tal
de saciar el morbo. Debemos nosotros entender también que el proceso de
peritaje e investigación de las causas de un accidente es un proceso lento y
que tiene que llenarse de evidencia y sustento, esto conlleva tiempo. Pero el
resultado es mucho mas confiable y con explicación mucho mas fiable de las
verdaderas causas.
Pero la decisión que se tomó fue declarar lo primero que se investigó y
las críticas no se hicieron esperar. Para asombro de muchos la UNAM avaló esta
declaración. Pero como egresado de la Facultad de Ingeniería de la UNAM puedo
asegurar que ninguna investigación realizada por la institución toma a la
ligera las conclusiones que se emiten. Estoy seguro que los investigadores
continúan con su trabajo y solo informan de los avances que se obtienen de acuerdo
a la evidencia presentada, no se ha emitido un veredicto final ya que ni
siquiera se cuenta con toda la evidencia necesaria.
Mientras tanto la gente ya regresó a laborar, los trabajos de retiro de
escombro continúan y la investigación sigue su curso. Pero la gente cree que ya
lo sabe todo y que ya todo está aclarado con errores. Veremos como culmina esta
historia pero debemos esperar con paciencia, de lo contrario se hace todo mal.
David
Rodríguez

              





